El dolor abdominal puede clasificarse en tres tipos principales: visceral, parietal y referido. Cada tipo de dolor tiene características distintas que pueden ayudar a determinar la fuente subyacente del dolor y guiar el diagnóstico y el tratamiento.
- Dolor visceral: Este tipo de dolor se origina en las vísceras abdominales, como el intestino, el estómago, el hígado o el páncreas. El dolor visceral es generalmente impreciso y se describe típicamente como una sensación de presión, tirantez o malestar difuso. Puede localizarse en áreas como el epigastrio (parte superior del abdomen), la región periumbilical (alrededor del ombligo) o la parte inferior del abdomen. La localización del dolor puede variar dependiendo de la ubicación de la víscera afectada y su relación con el desarrollo embrionario del intestino primitivo. Por ejemplo, el dolor que se origina en el intestino primitivo proximal puede manifestarse en el epigastrio, mientras que el dolor del intestino primitivo distal puede localizarse en la parte inferior del abdomen. El dolor visceral suele ser causado por la distensión de una víscera hueca, como la obstrucción intestinal, la distensión de la vesícula biliar o la distensión del colon.
- Dolor parietal: El dolor parietal se origina en la pared abdominal, específicamente en el peritoneo parietal, que es la capa externa del peritoneo que recubre la cavidad abdominal y los órganos intraabdominales. Este tipo de dolor es más agudo y mejor localizado que el dolor visceral. Se describe comúnmente como punzante, constante y más intenso que el dolor visceral. Esto se debe a que el peritoneo parietal está densamente inervado por las fibras nerviosas que provienen de las raíces nerviosas espinales. El dolor parietal puede ser provocado por la irritación, inflamación o lesión del peritoneo parietal, como ocurre en la peritonitis o la irritación peritoneal secundaria a una hemorragia intrabdominal.
- Dolor referido: Este tipo de dolor se percibe en un sitio distante del origen real del dolor. A menudo, el dolor referido ocurre cuando las fibras nerviosas aferentes de diferentes órganos comparten vías nerviosas comunes en la médula espinal, lo que puede resultar en la percepción de dolor en una ubicación diferente de donde se origina. Por ejemplo, el dolor referido al hombro puede ser un síntoma de irritación del diafragma debido a la irritación del peritoneo parietal en la parte superior del abdomen. El dolor referido puede complicar el diagnóstico ya que puede conducir a una interpretación errónea de la fuente subyacente del dolor.